En el verano del año 2017 Chile sufre una de las mayores tormentas de fuego de su historia, específicamente en la zona centro sur consumiendo cerca de 600 mil hectáreas. La región del Maule fue el epicentro, destruyendo poblados enteros, junto con la Escuela Rural de Ranchillos, de administración pública que sirve a las comunidades aledañas de esa zona rural. Esta obra unidocente para 20 niños, es una reconstrucción post catástrofe que fue financiada a través de una alianza Público-Privada liderada por la Fundación Desafío Levantemos Chile, el Municipio y donaciones de empresas como CMPC, Hunter Douglas, entre otros.
Intentamos que el proyecto tomara de referente una imagen de caserío o aldea, elemento recurrente en el imaginario rural de Chile, se compone de pabellones que en sumatoria y relaciones entre programas independientes, que al conectarse generan un espacio mayor de convergencia y participación. A través de esta configuración, se crear un lugar de encuentro para esa localidad rural.